“Nos los representantes del Pueblo de la Nación Argentina”…
Esta frase nos simboliza como líderes del país, con una constitución que pone reglas y limita al poder ejecutivo.
Los funcionarios públicos deben ser personas de servicio y ejemplo de desarrollo, representantes de todo el pueblo.
La desigualdad en nombre de la “justicia social” no debe ser permitido por el pueblo, y se vienen viendo año tras año.
Día a día venimos perdiendo libertades y sufriendo atropellos que nivelan para abajo nuestra calidad de vida. Somos un pueblo solidario por voluntad y hoy en nombre de la solidaridad nos imponen las cosas.
Resalto y aplaudo el discurso del jefe de gobierno de la ciudad, donde se confunde la opulencia con políticas de gestión planificadas y bien ejecutadas. No quiero poner color político a esta redacción, pero hay que valorar las cosas cuando se hacen bien.
Yo como argentino quiero trabajar en que dialoguemos en las diferencias , para que nivelemos para arriba y nos comparemos con los mejores.
No quiero que vivamos peleando por las diferencias del pasado que, como he escrito en otras cartas de opinión han hecho que hasta San Martín se fuera.
No podemos seguir pensando o escribiendo desde la agresión y la destrucción.
Somos argentinos, somos el pueblo , somos los que tenemos que marcar el rumbo para que las próximas generaciones vivan y amen en una Argentina mejor. Y no que duela como nos divida, que nos separe por egoísmos o mezquindades de algunos.
Yo amo a mi Argentina, desde donde esté y mientras viva voy a trabajar para esto.
Amemos al otro, aprendamos del otro y seamos felices con el prójimo.
por MARIANO LEDESMA AROCENA
Especialista en Energía y Analista Político
